¿Has sentido alguna vez fatiga, falta de aire y mareos? Si es así, quizás puedas sufrir de hipoxemia. La hipoxemia es una condición médica que se genera cuando la sangre no transporta suficiente oxígeno a los tejidos del organismo. Entender qué es la hipoxemia y realizar un diagnóstico de su padecimiento, puede ser clave para nuestra salud.
¿Qué es la hipoxemia?
La hipoxemia es una disminución de la presión parcial del oxígeno en la sangre arterial. Esto es, que tus niveles de oxígeno en sangre están bajo los valores normales. Dicha condición, puede ser originada por varias enfermedades y factores subyacentes; desde problemas cardiacos, hasta enfermedades pulmonares.
Importancia de medir los niveles de oxígeno en sangre
Medir los niveles de oxígeno en sangre puede salvarte la vida en algunos casos. Algunos de los casos en donde la medición del oxígeno es vital se muestran a continuación:
Detección temprana de problemas de salud subyacentes: la hipoxemia puede ser un indicador de enfermedades graves. El virus del COVID-19, la EPOC y la neumonía podrían ser algunas de estas. Medir tus niveles de oxígeno en sangre, puede ser la primera señal de alerta para identificar estas enfermedades a tiempo.
Control de enfermedades crónicas: si sufres de alguna enfermedad cardiaca o pulmonar, medir tus niveles de oxígeno te permitirá controlar tu condición, así como ajustar el tratamiento si es necesario junto a tu médico.
Mejorar la calidad de vida: unos niveles de oxígeno en sangre adecuados, reducen la fatiga y mejoran nuestra capacidad para realizar las actividades diarias.
¿Cómo se mide el nivel de oxígeno en sangre?
El oxígeno en sangre es muy fácil de medir, normalmente se hace con un pulsioxímetro. El pulsioxímetro, es un pequeño dispositivo que se pone sobre el dedo para medir la cantidad de oxígeno que es transportada pro al hemoglobina en la sangre. Estos dispositivos son muy fáciles de usar y están a la venta en la mayoría de las farmacias.
Debe medir tu oxígeno en sangre necesariamente si:
Padeces de alguna enfermedad cardiaca o pulmonar.
Experimentas dolor de pecho, tos persistente, mareos, fatiga, dificultad para respirar.
Si vives en zonas con mucha contaminación en el aire.
Si practicas deportes a gran altitud o vinculados a grandes altitudes.
Tras recuperarse de alguna enfermedad.
¿Qué puedes hacer si descubres que tus niveles de oxígeno son bajos?
Si detectas que tus niveles de oxígenos están por debajo de lo normal, es muy importante que consultes a un médico. Es necesario determinar las causas subyacentes para que te recomienden un tratamiento.
Así también, podrías tomar algunas medidas:
Dejar el tabaco.
Empezar a ejercitarte regularmente (bajo supervisión médica siempre)
Seguir una dieta saludable. Hay alimentos especialmente indicados para este padecimiento por su cantidad de antioxidantes. Además, debes mantenerte bien hidratado.
Evitar la exposición a contaminación e irritantes respiratorios: humo, cigarrillo, etc.
La hipoxemia puede llegar a ser una condición grave de no tratarse adecuadamente. Si sospechas que puedes padecer hipoxemia usa un pulsioxímetro para un despistaje rápido, y consulta con tu médico.
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